miércoles, 21 de octubre de 2009

+ 21-10-09 + Perdiendo la cordura

10:05 - Que raro me resulta dormir sin Belén a mi lado. La extraño tanto... tanto, tanto... Todavía sigue sin dirigirme la palabra ni mirarme. Ayer la encontré en uno de los baños. Le intente hablar, pero sin mirarme, se salió de la estancia. Con esto solo logra hacerme más daño. Cada vez que me hace un desprecio, es como si me atravesaran el corazón con una lanza. Siento como el corazón se me encoge y no puedo contener las lágrimas. ¿Me he ablandado con los años? ¿o me ocurre esto porque la quiero con locura? No lo sé, lo único que sé que con esta situación me encuentro como un trapo. Llevo varias noches que tengo que tomar algún tranquilizante para dormir. Si no lo tomo, mi cabeza empieza a pensar y a pensar, a darle vueltas a todo, me desespero, me entra la ansiedad, me comienza a faltar el aire... Por eso necesito una ayuda para dormir. Tengo miedo a engancharme a esas cosas. El que esta enganchado es Raúl. No se cuantos se tomara al día, pero se toma bastantes. Se pasa el día colocado. Hace días que no lo veo sobrio. Anoche, Manuel y yo decidimos quitarle los tranquilizantes y esconderselos. El problema es que los tengo yo, escondidos en mi habitación y es una tentación demasiado grande. No se como reaccionara Raúl cuando se le pase el pelotazo y no encuentre los Trankimazines. Es cuestión de tiempo...

Voy a desayunar algo, que ya es hora.

- Erik -


11:11 - Me he quedado de piedra. Esto parece una casa de locos. Me encontraba en el comedor, desayunando. También estaban Rubén, María y Manuel, cuando de repente, hemos oído un grito. He acudido corriendo, portando el arma, ya que me temía lo peor. Cuando he llegado, la situación distaba mucho de lo que podía imaginar. He encontrado a Elena en una de las salas de espera, llorando. En las manos sostenía a su gatito. Este estaba inerte y empapado en sangre. En ese momento, han acudido Manuel, María, Eduardo y Javier. Elena no paraba de llorar y me he acercado a ver mejor el cadáver del animal. Ver eso me ha quebrado el alma. Parece ser que lo han matado, ya que tenía varios cortes de arma blanca y la cabeza girada 180º. ¿Quién puede tener la sangre fría de hacerle eso a un pobre animal, indefenso y adorable?. Quién lo haya hecho es un puto monstruo... ¿Quién dice que, quién haya hecho eso al animalito, no nos cosa a puñaladas mientras dormimos? Si esta loco, puede ser capaz de hacer cualquier cosa. Le he preguntado a Elena si sabía quién es el culpable, pero su respuesta me ha helado el alma. Ella a contestado "¿Quién a hecho esto? ¡Habrá que preguntarle a la zorra de tu novia!". ¿Belén haciendo eso? ¡Me niego a pensar eso!. Le he dicho que si ha visto a Belén hacerle algo al animal. Me ha contestado que no, pero que después de lo ocurrido, ha sido ella sin duda. He salido de la habitación y he ido rápidamente a buscar a Belén. Necesitaba oír de sus labios que ella no es capaz de hacer eso. No iba ni por la mitad del pasillo, cuando he escuchado gritos y golpes que provenían de una de las habitaciones. He pensado "!Y ahora que cojones pasa!". He entrado a esa habitación y me he encontrado a Raúl, revolviendo toda la habitación mientras gritaba y maldecía. Tiraba todo a su paso, vaciaba los cajones, golpeaba las paredes. He intentado tranquilizarlo, pero de nada a servido, me ha empujado y gritado "¡¡Me los has escondido tú!! !¿Verdad?! ¡¡Me cago en tu puta vida, Erik!!". Os lo dije, era cuestión de tiempo que Raúl estuviera ebrio y necesitara tomar una dosis. Lo que no esperaba es que lo llevara tan mal. Visto esto, me he ido de la habitación, ya que esto podía acabar mal. Lo he dejado ahí, rompiendo todo e insultándome. Estoy conviviendo con un atajo de locos... Estaría más seguro con las cosas de ahí afuera.

Voy a buscar a Belén, necesito hablar con ella sobre lo del gato.

- Erik -


13:20 - Ya he vuelto. He ido a la habitación de Belén, pero no estaba. He encontrado a Esther, que se encontraba escribiendo en una libreta. Que raro... ¿estará escribiendo un diario? Nunca la había visto escribir. He podido ver que tiene varias paginas completamente escritas. Cuando he entrado, ha guardado rápidamente la libreta en su mochila. Le he preguntado por Belén y me ha contestado un "¿No le has hecho ya bastante daño?". No me he podido contener y le he dicho "¿Daño? ¿Yo? ¿A caso sabes a ciencia cierta lo que ocurrió? ¡Si no lo sabes, mejor no opines!". Su respuesta a sido "Yo solo sé que vi salir a Elena de tu habitación, vistiéndose. No creo que estuvierais jugando al parchis...". ¡Lo sabía! ¡Ha sido ella quién a metido el lío! Pero que hija de puta... Le he dicho lo siguiente:

"No sabes el lío que has metido... no lo sabes bien. Has acusado a una persona inocente de algo que no ha hecho. No solo me has destrozado a mi, has destrozado también a Belén, ¡a tu amiga!. ¿A caso estabas mirando por la cerradura para saber si me la follé? Para tu información, te diré lo que ocurrió. Yo salí de la ducha y me la encontre allí. Me empezó a hablar y dijo que me debía mucho y no encontraba forma de pagármelo. Ahí se desnudo... ¡pero la rechacé! Escuchalo otra vez y no lo olvides: ¡¡¡La rechace!!!. Siempre he sido una persona leal y ahora más que nunca. Quiero a Belén más que a mi puta vida y si por ella tuviera que mataros a todos, os metería una bala en el cráneo sin dudarlo. Ahora por tu culpa... ¡por tu maldita culpa! ¡ya no esta a mi lado! Tremenda perra... espero que te sientas a gusto con lo que has hecho, has destrozado dos vidas y solo te digo una cosa, más te vale que esto se arregle, porque si no, lo vas a lamentar... Yo me hundire, pero arrastrare conmigo a todo el que me haya hecho daño. Esto se llama justicia."

Dicho esto, he dado media vuelta y la he dejado ahí, sin palabras para contestar y con cara de sorprendida. Quizás he sido demasiado duro, pero es lo que hay, es lo que siento. No puedo permitir que me jodan y que todo quede impune. Como la odio...

Acaba de entrar Belén. Ahora es mi oportunidad.

- Erik -


14:01 - Si lo sé, no me dirijo a ella... Cuando le he dicho
"Belén, ¿te has enterado de lo del ga...?", no me ha dejado terminar, me ha gritado "¡¿Ahora me quieres acusar de matar al gato de tu zorra?! ¡¿Me ves capaz de algo así?! ¡¡Que engañada he estado contigo...!!".
Ha terminado soltándome un tortazo de los suyos. ¡Joder! ¡Como me jode eso! Pero todavía me humillan más sus palabras... ¿Por qué me hace eso? ¿Tan rápido ha pasado del amor al odio? Quizás nunca me ha querido y todo a sido palabrería barata... :( Ya no se que pensar. Solo se que cada vez que hablo con ella, es para sentirme peor.

Voy a darme una vuelta, necesito despejarme... y tomarme algo para los nervios.

- Erik -


20:31 - No ganamos para sorpresas. Si al menos fueran buenas...

Terminado el anterior párrafo, me he tomado un sedante. He caído KO en la cama, durmiendo varias horas. Las penas me han desaparecido, nada me preocupaba, todo parece más amable con esto... pero cuando se te pasan los efectos, las preocupaciones y males vuelven multiplicados. No os recomiendo acudir a estas cosas para resolver los problemas, ya que no se resuelven, solo los agrava. Pues bueno, me he levantado, totalmente mareado. He caminado a tumbos por el pasillo y he visto salir de la farmacia a Eduardo. Me ha llamado diciendo "¡Erik! ¡Ayudame! ¡Rápido!". He acudido lo más rápido que me ha sido posible en mi estado. Cuando he entrado a la farmacia, he visto a alguien en el suelo. Cuando he conseguido enfocar la vista, he distinguido a Raúl. Tenía la boca llena de espuma y estaba tumbado encima de un montón de botes de medicamentos. Me he sobresaltado al ver esto. Eduardo me ha dicho "Quédate junto a él. Se ha tomado varios tranquilizantes, pero lo he encontrado a tiempo, así que aún se puede hacer algo por él. Voy a llamar a Esther y a Rubén, ellos sabrán que hacer. Intenta que no se duerma". Eduardo ha salido de la habitación a escape y me he quedado ahí, mareado y sin saber que hacer. He intentado espabilar a Raúl. Le he dado tortazos en la cara mientras le repetía su nombre una y otra vez. La verdad es que yo también necesitaba unas cuantas tortas para espabilar. Él solo me ha respondido balbuceaando. He podido ver que en sus manos tenía las llaves de la vitrina de los medicamentos. ¿De donde mierdas las puede haber sacado?

Esther y Rubén han venido en seguida, junto a Eduardo. Como hemos podido, lo hemos subido a una camilla y se lo han llevado rápidamente. Lo han metido en una sala donde tienen los instrumentos necesarios para hacerle un lavado de estomago. Ahora mismo le están haciendo el lavado. Mientras os escribo, estoy fuera, en la sala de espera. Supongo que no les quedara mucho, ya que llevan un buen rato.

- Erik -


22:40 - Raúl esta bien, a dios gracias. Ahora estoy junto a él en su habitación. Él esta durmiendo. Ha tenido suerte de que Eduardo lo haya encontrado a tiempo, sino, no lo cuenta. Cuando despierte, intentare hablar con él, hacer que recapacite. Alguien tiene que vigilarlo esta noche, así que me he ofrecido voluntario. De todas formas, no iba a poder dormir...

Tantos problemas me están volviendo loco...

- Erik -


3 comentarios:

Unknown dijo...

buena entrada

J-Zombie dijo...

muy buena entrada,refleja perfectamente el agobio constante.
Sobre lo del gatito y lo de las llaves.......
sospecho de Javier en cuanto a las llaves,sobre lo del gatito no estoy seguro,podria haber sido Belen que por todo lo anterior es sospechosa ,tambien sospecho de Esther,quizas su diario tenga las respuestas a eso.
Como dices ,nunca la habias visto escribir.
Jose,otro que tal,menudo mueble de tio.
Creo que la lista de sospechosos es:
Javier le dio las llaves a Raul.
Al gatito lo han matado Jose,Belen o Esther

Miembro de la resistencia dijo...

Bienvenido, Capitan Pumuky, y gracias por tu comentario.

Y tú, Juanmanuel, en tu linea. Siempre tan rápido.

Un saludo