sábado, 23 de enero de 2010

+ 23-01-10 + Un error más

Después de nuestra frustrada y catastrófica incursión en el último pueblo, las cosas han ido a peor. Hemos arrastrado las consecuencias de una serie de errores fatales. En estos tiempos, un pequeño error, por ínfimo que sea, puede desencadenar una serie de acontecimientos que consiguen que las cosas vayan a peor. El día 16, Ricardo comenzó a quejarse de su herida, diciendo que esta le dolía horrores, le abrasaba. Esther le examinó la herida y le cambio el vendaje. Esther dijo "Esta herida tiene muy mala pinta. Esta infectada...". La verdad es que sí, dicha herida supuraba y lucía un feo color parduzco. A todo esto, Iván no paró de lanzarme miradas. No me decía nada, solo me miraba fijamente a los ojos. Podía leer lo que me decían sus ojos. Sabía que sus miradas se debían a la conversación que tuvimos el día anterior. Aún así, no me dijo nada.

Los días 17 y 18, Ricardo comenzó a mostrar un empeoramiento brutal y acelerado. Estos dos días los pasó con unas fiebres que volaba. Deliraba, balbuceaba cosas inconexas... Le hicimos un hueco al final del autobús, donde pusimos bastantes mantas. Allí lo tapamos y Esther lo vigilaba constantemente. Esta no era la única persona que permanecía a su lado. Iván estaba allí sentado, empuñando su arma y vigilando a Ricardo. Esto me sacaba de mis casillas. No paré de pensar "¿De que va el payaso este?". Creo que Iván se percató de mi hostilidad, pero no pareció importarle mucho, él siguió allí, sentado y vigilante. En esos momentos, seguía viendo imposible que una persona pudiera transformarse en una de esas cosas por el simple hecho de un mordisco. La fiebre la atribuía a una infección de caballo en la herida, nada más. Esto también lo decía Esther. Ella permanecía al lado de Ricardo, suministrándole algunos de los medicamentos que tenemos y empapandole la frente con trapos húmedos. Aun así, la fiebre no se rebajó.

El día 19, la herida tenía mucho peor aspecto, cambiando el tono parduzco por un color morado. Esther estaba confusa, ya que decía que no entendía como no se frenaba la infección. Al mediodía, Eduardo para el bus para comer algo. Fue entonces cuando Ricardo comenzó a vomitar. Ahí fue cuando Iván abrió la puerta del autobús y me hizo un gesto para que le siguiera. Cuando salí al exterior, comenzó a decirme: "Erik, te lo he dicho, Ricardo esta perdido. Esta infectado. Este estado es irreversible y por muchos medicamentos y trapos húmedos que le pongan en la cabeza, va a ir a peor. Esta por la antepenúltima fase. La siguiente son las convulsiones y la muerte. Cuando esto ocurra, se reanimara ¡Asúmelo, joder! O lo quitamos del medio o tendremos serios problemas. Estamos alargando su sufrimiento y poniéndonos nosotros en peligro...". Me disponía a replicar ante lo que me pareció una tremenda falta de humanidad, pero algo nos sobresaltó. Una de las chicas estaba gritando en el interior del bus. Empuñando las armas, entramos a toda prisa temiendo lo peor. Cuando entramos, vimos que quién gritaba era Elena. Estaba de pie, observando a Ricardo, el cual convulsionaba violentamente, tirando espuma por la boca. Alrededor de él, estaban todos. Ana y Esther intentaban sujetarlo y sacarle la lengua, ya que se la estaba tragando. Me quedé observando la situación sin saber que hacer. De repente, Iván paso por mi lado y se situó ante Ricardo, encañonandolo con la escopeta. Entonces dijo "¡Apartaos todos! ¡Esta infectado! ¡Si no lo quitamos del medio se transformara en cuestión de segundos!". Todos los presentes se horrorizaron y Fede se puso en pie, diciéndole que era un loco. Viendo que iba a apretar el gatillo, me abalancé rápidamente sobre él y lo derribe. Los dos caímos al suelo, pero consiguió zafarse de mi. Se incorporo rápidamente y me encañono, mientras que yo, desde el suelo, hice lo mismo. Le grité que bajara el arma, pero no me hizo caso. Me gritó "Erik, hay que hacerlo, ¡compréndelo!". En ese instante, Eduardo, desde su espalda, le situó la katana en el cuello y le ordenó que bajase el arma. Iván, sorprendido, dijo que no la iba a bajar. Transcurrieron unos segundos. Entonces Eduardo repitió la orden, pero esta vez alzando la voz y añadiendo una amenaza de lo que le haría si no lo obedecía. Ahí fue cuando poco a poco comencé a apretar ligeramente el gatillo de mi arma. Me disponía a abrir fuego, justo cuando algo llamó nuestra atención. Ricardo dejo de convulsionar. Esther le buscó las constantes vitales y dijo sorprendida "ha muerto". Iván corrigió la trayectoria de su arma y encañonó al cadáver de Ricardo. Yo hice lo mismo. Esther y Ana comenzaron a apartarse del cadáver, el cual seguía inmóvil. Pasaron unos largos segundos y comencé a pensar que no se reanimaría. Cuan equivocado estaban mis pensamiento. Sus ojos se abrieron de golpe y Ricardo se incorporó profiriendo un grito, mientras echaba espurramajos por la boca. No esperamos más y abrimos fuego. Las balas impactaron en el cuerpo de Ricardo, pero este no dejo de moverse hasta que una de las balas le impacto en la cabeza. No tengo palabras para describir la consternación que había en ese momento en el bus. Ana rompió a llorar y a gritar, mientras se agarraba al cadáver. A Fede se le caían las lágrimas. Elena también lloraba acurrucada en un rincón y Belén estaba con cara de shock. Iván estampó su escopeta contra el suelo y salió del vehículo a toda prisa.

Ahí permanecí durante unos minutos y luego salí a buscar a Iván. Lo encontré fuera, sentado sobre el capo de un coche abandonado que allí había. Cuando me situé a su lado, le dije "Te debo una disculpa. En serio. Estabas en lo cierto y yo equivocado. Por no haberte creído he puesto en peligro a todo el grupo. No quiero ni pensar que habría pasado si esto hubiese ocurrido a media noche... Quizás hoy lloraríamos dos muertes... o más. Pero quiero que comprendas que lo que tú proponías, matar a Ricardo sin que este estuviese reanimado, eso es intolerable y no te lo podía permitir. No tengo reparos en acabar con esos muertos reanimados, pero si los tengo en matar a una persona que todavía conserva la condición humana...". Iván me interrumpió en un tono grave, diciendo "No hace falta que sigas, tío. Te acepto la disculpa, ya esta, no le demos más vueltas al asunto. Ahora deberíamos preocuparnos en deshacernos del cadáver lo más dignamente posible". Después de esto, Iván volvió al bus y allí me quedé. He de reconocer que en ese momento derramé unas lágrimas por Ricardo...

En cuestión de poco tiempo preparamos el entierro más digno que podíamos darle a Ricardo. Buscamos todo tipo de materiales que combustionaran y los apilamos. Acto seguido, sobre la pirámide de maderas y telas, situamos el cuerpo de Ricardo y lo rociamos con gasolina que extrajimos de los vehículos que por allí habían. Eduardo fue quién le dio fuego a la improvisada pira funeraria. Ana y Fede lloraron como niños. Mientras el cuerpo se consumía entre las llamas, pude oír a Fede decir en voz baja "Ve con dios, hermano. Tú ya has conseguido escapar del infierno". Cierto, él ya ha escapado del infierno. Él ya no tiene que sufrir esta mierda. No tiene que torturarse pensando que nada volverá a ser igual, a vivir con el temor de que una horda de seres antropófagos nos devoren en un descuido. Su tormento ya ha acabado, él ya esta descansando.

Así es como hemos perdido a otro compañero. Buff...

En respecto a Iván, no se porque no le creí. Él me dijo que había visto casos de mordeduras que habían desencadenado con la transformación de los individuos, pero a pesar de eso, me empeñe en no creerlo. Desde que tuve conocimiento de lo que estaba ocurriendo, siempre pensé que las transformaciones se daban al morir el individuo, fuese de la forma que fuese. Creía que los personas que eran mordidas y morían, era por una complicación de la herida que era mal cuidada, pero ahora me doy cuenta que no. Una mordedura o contacto directo de fluidos con estas cosas, lo que consigue es matar al individuo y reanimarlo. ¿Por qué? No tengo ni la menor idea. Según me ha dicho hoy Iván, nunca había visto a un individuo tardar tanto en morir y reanimarse tras una mordedura. Según él, Ricardo ha tardado demasiado, ya que normalmente, la fase de muerte y reanimación se completa entre 10 y 24 horas. Aunque reconoce haber visto un caso de transformación que llevo dos días. En Ricardo ha llevado 3 días y poco. Como dice Iván, eso debe depender de cada organismo. Lo que si sabemos es que si alguno de nosotros somos atacados y nos muerden, estamos muertos...

- Erik -


6 comentarios:

J-Zombie dijo...

Muy buena entrada,sigue asi.
Eduardo mola mil y Ivan...a pesar de parecer un perturbado y un imprudente seguro que ira molando.
El Ivan de mi historia pronto tendra mas protagonismo,vas a pensar que el chico es Rambo,aunque bueno,con todo lo que a pasado debe serlo,en breve tendra un pequeño enfrentamiento con el otro Ivan .
Ivan v.s Ivan
Y yo hoy ya empiezo el 61,a ver si para el 11 de Mayo ya tengo escritos unos cuantos de la 4 parte ,o incluso la parte acabada y comenzar la 5 parte(esta ultima empezara a finales de año) el dia 26 de Octubre de 2010.

seeyouinthenextlife dijo...

Se veia venir que Ricardo iba a palmarla si o si. Empezarán a tomar a Iván más en serio si quieren sobrevivir.

Miembro de la resistencia dijo...

¡Saludos a ambos!

@juanmanuel: Cierto, Iván es la cara perturbada del grupo. El típico individuo que prefiere cortar por lo sano y en la mayoría de ocasiones actúa sin medir las consecuencias.

@seeyouinthenextlife: Ricardo no se podía escapar habiendo sido mordido. Cuando Iván le contó a Erik que el contagio también se realiza por mordisco, a este último le pareció muy fantástico. Ahora ya sabe que tiene que hacer más caso a cualquier cosa que le digan, por descabellada que sea. Ante la duda...

irakolvenik dijo...

Bueno, ahora Erik ya sabe de qué va la cosa... ha tenido que descubrirlo por el camino difícil.

Como comentario general, tu relato me gusta, pero te diría que me estoy empezando a liar con un grupo tan grande, al final se me olvida quién es militar, quién no... Sobre todo con las chicas, que tienen menos protagonismo, me cuesta recordar cuál es cada una. Sólo es un comentario, para que te fijes en algo que quizás teniéndolo tú tan claro no te das cuenta de que el lector no lo tiene tanto. Por supuesto, puedes ignorarlo si quieres ^^'

Un saludo! :)

Miembro de la resistencia dijo...

Hola Irakolvenik!

Hmmm.. Quizás es que yo los tengo clasificados en la mente y por ello no me cuesta tanto :S De momento, no se me ocurre más que decirte los nombres y quienes son para que en próximas entradas no te líes. De todas formas puedes preguntar cuando quieras, que no hay problema:

Erik: Creo que no hace falta que aclare quien es! xD

Belén: Novia de Erik

María: La única superviviente, junto a Erik, del grupo inicial, el de la urbanización

Esther: Enfermera. Hermana de Manuel, el cual murió en el hospital intentando huir con Erik. Estos estaban en otro piso de la urbanización, junto a Belén.

Eduardo: Estaba recluido en su casa cerca de la urbanización. Con su protagonismo creo que sobran más detalles.

Elena: La chica de 19 años que rescató el grupo de Erik y que es un poco "ligerilla" xD

Ana y Fede: Ambos militares. Compañeros de Ricardo, tambien militar y recientemente muerto.

Iván: El nuevo.


Espero que esto te sirva de ayuda! :(

irakolvenik dijo...

Pues aunque no lo parezca, creo que sí me será de ayuda! :)
Cuando me líe buscaré la lista y sin problema!